Rías Baixas protagonizaba anoche uno de los actos estelares previstos por el pabellón español, con un maridaje de cocina tradicional japonesa y seis blancos de esta denominación. El sushi y el sashimi de uno de las locales de moda en Tokio, el restaurante Fish Bank, eran acompañados por caldos gallegos en un escenario único que domina todo el skyline de la capital nipona desde los amplios ventanales de un piso 41. (...)
Tokio significa para los empresarios gallegos el intento de meter el pie en un suculento mercado caracterizado por un altísimo poder adquisitivo que implica excelentes márgenes de beneficio.
En el caso del vino gallego, ayuda también la fuerza que los caldos -especialmente los blancos- han adquirido en los últimos años. Su consumo ya es moda entre las jóvenes, como confirmó a La Voz de Galicia Chieko Konagaya, analista de mercado en Tokio del Instituto Español de Comercio Exterior (Icex): «Son las mujeres de 20 a 40 años las que entienden de vino en Japón y lo eligen cuando salen a cenar con amigos o en pareja. Los blancos gallegos maridan muy bien con la cocina japonesa, que es ligera y con mucho protagonismo del pescado crudo, como el sushi o el sashimi ».
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